Las redes sociales, principalmente las basadas en vídeos cortos están causando sensación en todo el mundo, con cifras estratosféricas en todos los países, culturas y edades. Aunque, especialmente entre las nuevas generaciones, está causando mucho más furor.
El problema de este tipo de redes es la larga exposición de adolescentes, jóvenes e incluso niños y niñas, y con ello conlleva adicción y alteración de su percepción de la vida. La salud mental de un adolescente es frágil, sus valores y convicciones están en plena formación y son fácilmente influenciables.
Si otras generaciones sufrieron graves problemas por estándares de belleza que provocaban enfermedades mentales como bulimia o anorexia, los jóvenes de hoy tienen un gran problema con su exposición no sólo ya a cuerpos perfectos, también a vidas perfectas de ensueño.
Ahora las plataformas quieren lavar su imagen y dejar de ser ‘altamente perjudiciales para nuestra salud’, porque así lo han determinado ya todos los expertos en salud mental y neurólogos.
‘TikTok lite’ es la nueva versión de pago por visualizar algunos vídeos o dar ‘me gusta’, y se trata de la última medida de la plataforma para demostrar que ‘no es adictiva’. Evaluar los riesgos de su uso es la intención de las autoridades para salvaguardar y proteger a los menores de edad especialmente vulnerables.
Los usuarios de esta nueva aplicación pueden conseguir dinero al visualizar vídeos, dar ‘me gustas’ o siguiendo a creadores de contenidos. Ese dinero es canjeable en Amazon, PayPal…
Is social media "lite" as addictive and toxic as cigarettes "light"?
— Thierry Breton (@ThierryBreton) April 17, 2024
We have just sent a request for information regarding the launch of #TikTokLite.
We will spare no effort to protect minors under the #DSA. pic.twitter.com/3oC0Msm28J