Revolución en los recipientes de marcas de agua, refrescos, leche, cerveza… Ni botellas de plástico de un solo uso, ni vivir ajenos a un problema que es de todos y para el que todos podemos sumar y aportar nuestra colaboración.
Lanjarón y Pepsi usan plástico 100% reciclado para fabricar sus botellas. Se acabó aquello de usar y tirar. Hábitos insostenibles que no significan el fin del uso del plástico en productos de alimentación, al contrario, se fideliza la utilización de un material que es barato, cómodo, y resistente.
El matiz no es baladí: ahora todo el plástico usado en estos recipientes ha sido reciclado de usos anteriores y la economía circular equilibra lo que hasta ahora era un tremendo desequilibrio medioambiental. Con esta medida que puede parecer ‘poco transcendente’, además de evitar la contaminación al crear y fabricar un nuevo plástico para una nueva botella, logramos la reducción de residuos contaminantes.
Si las imágenes de océanos, mares y ríos atestados de plásticos nos provoca desaliento, solo evitando que esos plásticos puedan acabar en lugares no idóneos, quitándolos de la circulación podemos lograr que haya desalmados que ensucien paisajes y ecosistemas.
Desde Lanjarón destacan que este tipo de medidas “es el resultado de la implicación y trabajo de todas las áreas de la compañía” y adelantan la fecha prevista inicialmente, 2025, para volcarse con la “circularidad y producir sus botellas de agua sin la necesidad de extraer recursos nuevo al planeta”.