La exuberancia de los complementos, alfombras que se superponen una con otra, flores, colorido y mezcla de estilos. Ése es el alma del ‘Boho Chic’ que cada vez enamora a más celebrities e influencers que se quieren alejar de los estereotipos.
No hay normas, no hay cánones. Mezcla tonos azules, rosas, marrones… al libre albedrío. Por ejemplo en flores de diferentes tamaños, y en diversos soportes como pequeños floreros transparentes y grandes floreros coloridos y estampados.
No hay que prescindir de nada. El estilo Boho Chic que ha conquistado a celebrities, influencers y decoradores de bodas y eventos, viene tremendamente marcado por la personalidad de los habitantes de la vivienda. A veces se acerca a la inspiración naturalista, ibicenca y costera, a veces es más bohemia y se nutre de las tonalidades pasteles como denominador común, pero sin duda, siempre sorprende e hipnotiza.
Decantarse por una alfombra rectangular y lisa de lana virgen pero no querer renunciar a otra alfombra redonda de fibras sintéticas con rombos; pues bienvenidas ambas a compartir incluso un mismo espacio. No sirve solo con una, y las alfombras aparecen en muchas estancias superpuestas unas sobre otras.
Su idiosincrasia es precisamente la despreocupación por la mezcolanza de estilos decorativos y elementos a priori excluyentes. Los muebles de diferentes materiales y estilo caben en un mismo salón sin crear fricciones.
Con cierta inspiración bohemia, el boho chic une clásico, romántico, contemporáneo, industrial,… Mezcla maderas nobles, con lacados, cristal, metal, terciopelos, sintéticos o piedra.
Logra combinar con gran armonía objetos étnicos de diferentes orígenes, como piezas asiáticas, tribales, balinesas, griegas, africanas, nórdicas, caribeñas…
Una mesa de madera de pino natural puede ser el epicentro de contrastes perfectamente escogidos, como textiles de colores atrevidos sin combinar, sofá de tono neutro, sillón o butacas de colores atrevidos o incluso estampados. Pero no solo es un mosaico de colores, también de materiales. Terciopelo, lino, cuerda, corcho, ¡no nos privamos de nada!