Materiales plateados, cromados, en acero, espejos y reflejos aportan sofisticación y singularidad sea cual sea tu estilo. Decoración y arquitectura salpicadas con piezas cromadas.
Por sí solo el color acero es hipnótico y genera ambientes sofisticados y elegantes. Si además lo combinamos con metal en negro, madera en tonos naturales o con otros materiales como cristal los resultados son infalibles.
Bandejas, jarrones, faroles, candelabros, portavelas o pequeñas esculturas son algunas piezas que ganan una gran singularidad en un material con acabado cromado. Piezas que por sí solas desprenden una gran sencillez y personalidad.
Las lámparas que unen textiles con metal o las que únicamente se componen de elementos metálicos también escogen el plateado como color básico para que resulten fácilmente combinables con cualquier mueble y el resto de la decoración de la estancia.
El plateado, al igual que el dorado, son la mejor pareja de baile de cualquier material, bien sea textil, estampado o liso, otros como metal o cristal, y por supuesto con materiales naturales como madera, nácar, yute, lana, cuerda, corcho, etc.
Otro espacio que ha colonizado el acero o cromado es más pensado desde incluso la construcción de la vivienda. Porque también son tendencias y se buscan cada vez más los perfiles plateados de muebles, de puertas o ventanas, de suelos de dos ambientes o alturas distintas. Tiradores de muebles de cocina, baño o sinfonier y armarios en los dormitorios, y por supuesto los anclajes y detalles en los vestidores aparecen en plata mucho más que en tonos dorados u otros colores.
En los pasamanos y soportes de barandillas en escaleras el tono cromado es el rey en miles de combinaciones, especialmente combinado con cristal o solo en montajes con un único elemento.
Prácticamente todas las combinaciones de acero con otros tonos lacados intensos como negro, gris, blanco, rojo, azul,… suelen aportar un resultado equilibrado. Sin embargo, el contraste con madera, cristal, hueso, piedra es sin duda donde más luce. También es muy recomendable unirlo con tonalidades que resalten, es decir, que contrasten lo máximo posible para que ponga en valor su originalidad.
Hoy los espejos con un gran marco o soporte grueso ganan terreno en los hogares. Nos olvidamos de su utilidad para ver nuestro reflejo o incluso para dar amplitud a los espacios de nuestras estancias. Y únicamente los elegimos y buscamos como elementos decorativos para colocarlos en lugares destacados donde llamar la atención y centrar todas las miradas.
Los soportes y patas de muebles, mesas, sofás, butacas, banquetas,… que se inundan de acero ligero y discreto, a la par que elegante, cómodo y práctico. A veces en lugar de sencillez y utilidad, aparecen curvas con grandes reflejos para dotar de arte objetos completamente prácticos como una silla o una mesa auxiliar. Ahí el cromado alcanza probablemente su mayor esplendor.