Arrancamos año quitando la decoración navideña que deja ‘desangelada’ nuestra casa… Desaparecen los alegres colores, fantasías y luces acogedoras. Hay que sobreponerse con tejidos cálidos que arropen nuestro hogar del frío. Renovar textiles es la solución fácil y económica en plena cuesta de enero. Mantas, plaids y cubrecamas, alfombras…
Mantas, plaids o cubrecamas, alfombras, cojines, nuevas tapicerías o cortinas…. Los textiles renuevan nuestro hogar y crean nuevos ambientes más acogedores en el frío invierno. Los tejidos se vuelven más gruesos como la pana, el terciopelo o la lana para dar ese abrigo tan agradable en estas fechas.
En todas las estancias de la vivienda se pueden incorporar textiles acogedores. En el despacho una mantita doblada en el sillón o sofá, o en el respaldo de la silla. En los baños aparecen pequeñas alfombras que restan el frío propio de estos espacios. En los dormitorios también se distribuyen nuevas pequeñas alfombras en los pies de la cama o en zonas de paso, para dar mayor sensación de calidez a toda la habitación. En las camas hay miles de opciones de plaids y cubrecamas para ‘abrigar’ el espacio, independientemente de que al dormir se use o se retire a una pequeña butaca por ejemplo.
Mismo efecto en los pasillos, distribuidores o halls, donde podemos disponer de alfombras por ejemplo redondas que crean efectos visuales muy atractivos y estilosos a la vez que aportan ese toque cálido tan buscado en esta época. También en las zonas de almacenaje como cestas, cajas, huecos de estanterías, etc. Podemos incorporar pequeñas mantitas dobladas en tejidos y colores que alegran y arropan esos espacios.
En los salones las opciones son más amplias incluso, ya que además de alfombras y mantitas de sofá podemos incorporar más cojines y en tejidos diferentes como combinados de pana, lana, terciopelo, paño o pelo, entre otros. Aquí, también surgen tonalidades invernales como burdeos, antracita, camel, marino, khaki,… Las gamas de varios verdes o grises son una opción muy combinable y que se agradece en el conjunto. Es decir, apostar por un color y utilizar varias tonalidades del mismo en distintas intensidades.
Si elegimos varios cojines en tonos burdeos en diferentes tonos más y menos apagados en degradación, el resultado será una agradable escalera de colores sutiles, discretos pero que arropan tu sofá y a tus invitados.
Se puede aprovechar esa incorporación de nuevos colores propios del invierno para adquirir alguna pieza decorativa en esos tonos y que el ambiente resulte mucho más armonioso. Solo con algunos toques es suficiente. Si te decides por los verdes apagados puedes añadir a tu salón unas ramas de hojas secas en los mismos colores y por ejemplo una vela. Solo con esas discretas pinceladas cambiarás la cara de tu nuevo salón preparado para iniciar la nueva temporada hasta que resurja la luz y el color en la próxima primavera.
Existen elementos decorativos como marcos de fotos o cajas decorativas forradas en tejidos como el terciopelo que también son una decisión acertada en estos conjuntos. Un marco de fotos con sus márgenes o solo las esquinas por ejemplo en terciopelo azul con una lámina o una foto en tonos claros, es un toque elegante y llamativo que entona perfectamente en esta época del año.
