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Decoración natural, el poder de la sencillez

Decoración natural, el poder de la sencillez

Lo natural y sencillo es inigualable. Tejidos atemporales en colores neutros y lisos que te abrazan y convierten cualquier espacio en acogedor. La conexión con la naturaleza es tendencia con ricas tramas y texturas que da gusto tocar, sentir y pisar.

Decoración natural, el poder de la sencillez

Algodón, lino, corcho, cuerda, mimbre, yute, lana, ratán, bambú, rafia,… sus texturas son inimitables y su toque natural el más buscado. Especialmente en verano nos gusta tocar, sentir y pisar este tipo de tramas y tejidos en cualquier textil de la casa, tanto en interior como en exterior y en cualquier estancia de la vivienda.

Decoración natural, el poder de la sencillez

Alfombras de materiales sin tratar o trenzados, que pisamos descalzos para sentir lo natural directamente. Cojines en lino, algodón y mezclas con el punto justo de artesanal que lo convierte en una pieza atractiva digna de destacar en el centro de un gran sofá. Si además llevan motivos vegetales como hojas, palmas, flores, o si escoges rayas discretas, el acierto es seguro.

Los estampados más habituales son los motivos vegetales discretos y las geometrías sencillas y sutiles. Las divisiones en varias tonalidades como la mitad en cada color o un tercio, y la combinación de varios tamaños en los mismos modelos.

Combina textiles en salones, dormitorios, despachos, entradas, cocinas con banco… para lograr la conexión con la naturaleza gracias a la sencillez y naturalidad de unos tejidos que no pasan de moda y siempre son tendencia.

Cestas, faroles, bolsas de almacenaje, sujeta macetas colgantes, pufs, marcos de espejos o cuadros, alfombras, caminos de mesa, cojines, pantallas de lámparas de techo principales o pequeños puntos de luz de sobremesa o pie, tiradores, servilleteros, salvamanteles o bajo platos, maceteros, recipientes de velas, revisteros,… Donde puedas imaginar, puedes incorporar estos tejidos versátiles y muy combinables.

Los tejidos lisos en colores suaves son los más escogidos por esa alta versatilidad, que nunca cansa ni pasa de moda. Beige, gris, crudo, hueso, marfil, blancos, piedra… tonalidades muy discretas para poner en valor otras piezas y que contrasten con cerámicas de colores, maderas, cueros y lacados.

tejidos lisos en colores suaves

El poder de la sencillez es su gran aliado y atractivo. La máxima de ‘menos es más’ aquí viene muy acorde para combinar sin recargar. Aportan toques étnicos, rústicos, provenzales,… con cabida en prácticamente todos los estilos en su justa medida. ¡Déjate abrazar por las fibras y tejidos naturales!

lámpara de pie de madera y plantas