Con el objetivo de mejorar la seguridad vial, la Dirección General de Tráfico sustituye los ya clásicos triángulos reflectantes de emergencia, por una baliza o luz LED que se coloca sobre el techo del vehículo averiado. La principal ventaja de esta nueva tecnología aplicada en carretera, es que en lugar de tener que desplazarnos unos metros por la calzada para colocar a la distancia suficiente los triángulos naranjas, ahora no tendremos casi ni que bajarnos del vehículo.
Un elevado número de atropellos en carretera se deben precisamente a estas situaciones, donde un vehículo se avería, queda ocupando algún carril o arcén en la vía y cuando el o los ocupantes se bajan a colocar la señalización, otros vehículos de la carretera pueden no verles con suficiente antelación y producirse una colisión.
La nueva luz ‘inteligente’ no será obligatoria hasta 2026, sin embargo es muy recomendable sustituir los triángulos cuanto antes ya que la mejora en la seguridad vial es muy notable.
Se trata de la llamada luz V-16, un dispositivo intermitente en color naranja que se colocará en caso de emergencia en la parte superior del vehículo, por ejemplo, el techo en un turismo. Además de su alta visibilidad, posee un sistema de geolocalización que ayudará a señalizar en los paneles informativos de la DGT que a cierta distancia hay un vehículo ocupando un carril por ejemplo.
La visibilidad del vehículo, incluso con inclemencias meteorológicas, se incrementa de forma sustancial. Se trata de un dispositivo autónomo de apps móviles ni internet, y funciona únicamente con pilas.
