Aeropuertos paralizados, carreteras colapsadas, deslizamientos de tierras, inundaciones… Dubái ha vivido unas lluvias sin precedentes que, en apenas 12 horas se ha acumulado en el aeropuerto de Dubái el agua que suele llover en un año entero en esta zona.
La península arábiga ha sufrido un temporal muy fuerte que además de daños materiales, incluso se ha llevado la vida de 19 personas en Omán. Vientos y tormentas que han castigado duramente a los Emiratos Árabes Unidos. El agua en las ciudades ha superado la altura de la rodilla de los ciudadanos, y en las calles flotaban contenedores, sillas, hasta incluso coches.
Dubai Airport Right Now pic.twitter.com/IINIXhmyYP
— St⭕ck Wi💤ard SEBI R.A (@saditya10p) April 16, 2024
¿Qué es la fabricación de nubes?
La polémica de un fenómeno climatológico así ha incluido la crítica de la llamada tecnología que ‘siembra’ nubes para provocar lluvia natural, pero de forma artificial. También es conocido como ‘bombardeo de nubes’, un concepto que altera la meteorología para que llueva en situaciones de sequía.
Las nubes y sus gotas de condensación se provocan de forma artificial, es decir, las gotas de las nubes no se forman por sí mismas, ya que para que esa humedad se condense precisa unas partículas diminutas.
Para ‘sembrar’ nubes lo que se hace es incorporar esas partículas de forma artificial en el aire gracias básicamente a aviones. Las partículas que se inyectan son principalmente yoduro de plata, que facilita la condensación de la humedad en gotas.
El cambio climático está provocando en numerosos puntos de todo el planeta episodios extremos como estas lluvias tan intensas y concentradas en muy pocas horas, sin embargo, ¿cómo se puede distinguir si estas lluvias son fruto de la tecnología conocida como 'siembra de nubes' o si es culpa del calentamiento global?
