Invertir en vivienda es un valor seguro incluso en tiempos de pandemia, se ha convertido ya en una de las opiniones más extendida en los últimos meses. Resistiendo y demostrando fortaleza desde el inicio de la pandemia en España y así continúa. Mes a mes después del atípico ejercicio 2020, e incluso en lo que llevamos de año, está demostrando que, especialmente la obra nueva, ni ha bajado sus precios, ni tiene intención de hacerlo. Así de contundente se muestra el mercado de un sector actualmente fuerte y sólido.
Un sector estable y dinámico que muestra demanda constante por lo que mantiene sus precios de manera generalizada con las oscilaciones típicas de zonas y ciudades. Lideran el tirón de esta demanda los chalets y casas unifamiliares con una subida en sus precios de 3,2% de media, mientras que los pisos solo han subido un 0,7%.
La opinión es generalizada, tanto usuarios como profesionales del sector apuntan el cambio en las necesidades y gustos después del coronavirus. Es muy evidente la tendencia evidente hacia una clara demanda de viviendas más amplias y espaciosas, con exteriores y en zonas más alejadas de los grandes núcleos urbanos.