¡Muchas curvas! Las formas más redondeadas nos despiertan sensaciones, nos hacen vibrar y transforman nuestro hogar en un lugar atractivo y singular. Líneas que darán fluidez, movimiento y relajación a tus espacios.
La decoración orgánica con formas sinuosas está de moda y es muy comprensible, porque es capaz de transmitirnos armonía, relajación, continuidad… El diseño de interiores busca fluidez entre espacios y esto lo logramos con líneas redondeadas en mobiliario, cerramientos, esculturas, textiles…
Haz la prueba, sustituye cualquiera de tus alfombras de líneas rectas, bien cuadradas o rectangulares, por otra ovalada o redonda. El efecto visual es transformador por completo. Es un simple gesto y un elemento concreto, así que imagina cómo puede cambiar tu casa con un diseño de interiorismo basado en las formas orgánicas.
Nos gustan las tendencias emergentes, los cambios y las sensaciones que nos hacen vibrar, por eso nos gustan las formas orgánicas en casa. Aportamos un toque muy dinámico con fusión de muchos estilos y diseños diferentes que nuestra vivienda agradece con la llegada de la nueva estación.
Hace décadas los primeros atrevidos que apostaron por una línea decorativa basada en líneas orgánicas, fue por puro contraste y rebeldía. En el siglo XX, para romper con las líneas rectas y encorsetadas que habían dominado hasta entonces el interiorismo, la curva y las ondas conquistaron los estudios de interiorismo más disruptivos.
Las ramas de los árboles son onduladas, la forma de las nubes también es sinuosa… La naturaleza nos da la clave, sólo hay que observarla y plasmarla en tu decoración e interiorismo, pero a tu gusto.
También las mesas principales y auxiliares evitan las esquinas y dejan paso a formas mucho más sinuosas, sensibles, delicadas… Las patas rectas y limpias de sillas, mesas o pies de lámparas desaparecen para apoyarse en soportes redondos sin ángulos.