Las vibraciones que algunos objetos decorativos aportan a tu casa van mucho más allá de colores y texturas. Nostalgia y sentimiento de la mano de materiales naturales con imperfecciones e irregularidades como la naturaleza. ¡Da un extra de originalidad, fuerza y carácter con tu decoración étnica!
De muchos viajes, especialmente a lugares más exóticos o lejanos, solemos traer recuerdos, objetos significativos de ese país o esa cultura, y precisamente el estilo decorativo étnico es la suma de esos viajes. Culturas que se mezclan en tu hogar para llenarlo de vibraciones originales.
Hoy, sin embargo, la evolución de este estilo decorativo le ha llevado a conquistar espacios muy sofisticados con toques étnicos que los convierten en ambientes especiales, con carácter y fuerza, para distinguirse de otros desnaturalizados o sin alma.

La decoración étnica se caracteriza tradicionalmente por sus materiales naturales, grandes contrastes y sus originales diseños muy auténticos y propios de diferentes folklores y tradiciones. Los más habituales suelen coincidir con las culturas indígenas, greco-romana, africana, tribal, asiática, mexicana, balinesa, budista, bereber…
Se trata de integrar en una casa actual, símbolos artesanos y propios de otras latitudes o religiones. Figuras decorativas, máscaras, jarrones, textiles, estatuas… Y otros elementos adaptados a esta tendencia, como las mesas o, especialmente, los textiles étnicos que son muy originales ya que se nutren de formas geométricas o estampados muy concretos y exóticos.
Fibras naturales, maderas, terracotas, arcillas… con acabados envejecidos en diversas tonalidades. Que dejan al descubierto nudos, grietas, marcas, hendiduras o señales de la mano humana en su fabricación artesanal. Así, las piezas son realmente únicas, nunca hay dos exactamente iguales, ni de tamaño, forma, tonalidad ni imperfecciones.
Una de las claves de esta tendencia decorativa étnica, como en muchas otras con una gran personalidad, es dosificarla. Las piezas étnicas suelen tener mucho color, texturas y formas muy peculiares, por lo que no pasan desapercibidas y sus combinaciones son mucho más especiales que otros elementos más sutiles y neutros de otros estilos.
Arriesga con muchos elementos en fibras naturales y no te cortes con el ratán, un material tan versátil que cabe en decenas de pinceladas. El macramé no solo está de moda en sí mismo, si no que es capaz de aportar una calidez que pocos elementos consiguen. Maceteros, decoración de pared, cortinas… cualquier detalle en macramé será bienvenido en tu decoración étnica.
Capaz de sobrevivir a otras modas, el estilo decorativo salpicado de toques étnicos es original y por eso nos conquista. Su poder de evasión y el viaje sensorial que logra transmitirnos nos enamora y por eso no pasa de moda, al contrario. ¡Bienvenidos a casa!