Para el 80% de los vehículos nuevos, subirá el impuesto de matriculación con el nuevo año. Ahora las mediciones de emisiones de CO2, y el ciclo llamado WLTP, servirán para calcular el segmento de cada coche para el impuesto.
Actualmente se paga más por la matriculación de los vehículos que más emisiones contaminantes emiten. Hasta ahora, estaban exentos de esta tasa aquellos con emisiones inferiores o iguales a 120 gr/km CO2; aquellos entre 120 y 160 gr/km CO2 pagaban un 4,75%; de 160 a 200 gr/km CO2 un 9,75%; y por último, los que emiten más de 200 gr/km CO2 que abonaban un 14,75%.
Para aliviar la caída de ventas del sector automovilístico, el gobierno elevó estas emisiones en todos los tramos para que el impuesto no se incrementase tanto, y la mayoría de los vehículos continuarán en el mismo tramo. Sin embargo, esta moratoria toca su fin con la entrada de 2022, y la nueva norma estipula nuevas horquillas de emisiones. Esto supondrá que para la mayoría de los coches, aproximadamente ocho de cada diez, el impuesto de matriculación subirá en torno a un 20%.
El sector no pasa por su mejor momento para soportar la subida de este impuesto, cuando todavía no se han retomado las ventas de antes de la llegada del coronavirus. De media, se espera que el incremento sea de entre 600 y mil euros.