Estrés y ansiedad nocturnos… es tendencia y no voluntariamente. Miles de personas no pueden dormirse porque su mente va muy rápido cuando apagan la luz.
Todos tenemos problemas o preocupaciones, y a veces, literalmente no nos dejan dormir. Situaciones económicas, laborales, personales, miedos e incertidumbres, estrés por un modo de vida demasiado acelerado... Siempre hay un motivo para quebrantar nuestra paz interior, pero para amortiguarlo o evitar que venga a visitarnos cada noche a la cama, hay algunos consejos.
La meditación está ganando mucho terreno en esta vida tan rápida que vivimos. La sociedad necesita pararse a pensar, y en concreto, las personas adultas necesitamos tomar perspectiva para seguir con ritmo.
Recrearnos en pensamientos felices nos ayuda a interiorizarlos y por tanto, potenciar esa parte de nuestra vida, nuestros sueños futuros, nuestros recuerdos bonitos,… No nos recreemos en lo malo o inestable, al contrario, fomentemos aquello que nos provoca endorfinas y alegría.
Igual que debemos potenciar los encuentros con las ‘personas vitamina’ que nos suman energía y alegría, y debemos alejarnos de esas otras ‘personas tóxicas’ que nos absorben la energía y enturbian nuestra estabilidad. Del mismo modo, hay que potenciar los pensamientos positivos y las ideas motivadoras, y alejar de nuestra mente aquellos recuerdos dolorosos o pensamientos negativos.
Precisamente, cuando nuestro cuerpo se relaja y encuentra un momento de flaqueza, cuando nos metemos en la cama y nadie nos habla ni escribe al móvil, ahí vienen el estrés de todo lo que hay que hacer al día siguiente, o los comentarios tóxicos y poco enriquecedores que nos hayan hecho ese día. Y justo ahí es cuando nos pueden alterar el sueño y crear ansiedad al recrearnos y dejar que vuelen en nuestra imaginación.
Hay tantos trucos para dormir, como personas, pero muchos coinciden en que un baño caliente un rato antes de irse a la cama ayuda mucho. También ingerir alguna infusión o leche tibia, sin azúcares ni cafeína, eso sí.
Aunque puedan parecer incluso obviedades, los expertos en sueño recuerdan recomendaciones básicas para dormir bien y lograr dormirse pronto:
- Cerrar los ojos
- Dormir sin ruidos
- Cerrar la puerta del dormitorio
- Dormir sin luz ni pilotos de aparatos encendidos
- Dejar el móvil fuera del dormitorio
- Leer y/o relajarse antes de meterse en la cama
- Respirar profundamente
A veces lo simple es lo más efectivo, y en temas de descanso hay que salvaguardar nuestra salud, porque depende en gran medida de un sueño reparador y con el número de horas suficiente. A lo largo de los años somos lo que hacemos muchas veces, y si nos acostumbramos a dormir poco o mal, al final nos pasará factura en nuestra salud.
