Integrar sillones con paredes, estanterías invisibles, puertas que no existen… Innova y experimenta con las profundidades y los volúmenes. Así tu salón parecerá más espacioso y tu baño más acogedor.
Camuflajes de muebles gracias a colores e integraciones de diversas piezas en el mismo material. Por ejemplo podemos lograr este efecto usando el color blanco para gran parte de artículos de un salón en diferentes estilos como minimalista o vintage. Buscando la luz y el espacio el blanco es el rey de la integración. Pero se pueden provocar espacios amplios cuando integras varios objetos en el mismo color gris, beige, etc.
Un sofá en color mostaza y una alfombra del mismo color mostaza es alargar las líneas, continuarlas. Romper con piezas que se integran como cojines en el mismo tono de mostaza. Y combinar todo el ambiente con líneas monocromáticas que solo se encuentran con un color más, por ejemplo mostaza y gris marengo.
Con muebles ocultos aunque estén al descubierto logras un efecto visual armonioso, equilibrado y que agranda los espacios en las estancias. Por ejemplo, las puertas camufladas no rompen la continuidad visualmente y eso provoca profundidades mayores. Que no te parezca ni soso ni plano; paredes blancas y puertas blancas está de moda. Incluso puertas sin tiradores o con manivelas en el mismo color para no romper el ambiente monocromático.
Cuidado con los colores porque integrar puertas, electrodomésticos o muebles es una tendencia que no para de crecer y hay ejemplos mucho más atrevidos. Hay quien lo tiene claro y algunos arriesgan en colores intensos como mostaza, naranja, verde hierba o fucsia. Tonos que pueden provocar efectos distintos, igual que ocurre si utilizamos colores oscuros como verde botella o marrón chocolate.
Los blancos, grises, piedra o pasteles suaves se integran con discreción, mientras que los tonos intensos y fuertes dan mucha personalidad al ambiente, pero se integran menos porque el camuflaje, la discreción es mucho menor. Es decir, integrar con tonos arriesgados o incluso con estampados se puede hacer si solo se hace una integración puntual, en una única estancia o una sola pared.
Estanterías sin fondo y con los perfiles en el mismo color que la pared hacen que baños, cocinas, paredes de entradas o de dormitorios parezcan una superficie casi plana. Estéticamente el efecto es de los más buscados por su simplicidad, limpieza y minimalismo moderno.
Los electrodomésticos se panelan para camuflarlos como una puerta de mueble más. Así no se distingue el frigorífico de una cajonera o un despensero. Espacio sencillos y muy limpios visualmente que aportan vanguardia y diseño a tu cocina.
Los marcos de cuadros y fotos pueden directamente desaparecer, pero un paso más estiloso y sibarita es camuflarlos con el fondo de la pared, bien esté pintada o con papel estampado. También si el cuadro está dentro de una estantería apoyado, el color de trasera y el marco del cuadro ya no combinan, se funden y confunden.
Al igual que podemos integrar con el color, también la textura y los materiales pueden lograr el mismo objetivo. Investiga, experimenta y ¡acierta!
