Materiales que nos conectan con la Naturaleza precisamente para que nuestro hogar sea un remanso de paz y desconexión. Desde pequeña decoración y textiles, a baños o cabeceros de dormitorio en cáñamo, yute, lino, rafia, algodón, esparto… Naturalidad, sencillez y tonalidades que te conquistarán esta primavera.
La decoración salpicada de materiales naturales, especialmente las fibras, provoca que nuestro hogar se convierta en un ambiente acogedor, cálido, apacible y sencillo. Un lugar donde sentirte cómodo, tranquilo y confortable.
La decoración con rafia o yute es el toque perfecto para dar calidez a toda la estancia, por ejemplo, puedes conseguirlo con lámparas de techo o esculturas. Lejos de ese toque exótico, hoy los materiales naturales y materias primas al natural no son sinónimos de un estilo decorativo étnico como hace unas décadas.
Una lámpara de ratán o cáñamo es el punto de sencillez que armoniza nuestro salón independiente de tu estilo más o menos minimalista, contemporáneo, provenzal…
También las alfombras son las reinas de los materiales naturales en casa. Una pequeña alfombra redonda en un distribuidor u ovalada en un rincón de lectura. Piezas más amplias rectangulares para un lugar privilegiado delante del sofá o del mueble de televisión principal.
Las alfombras de cualquier fibra natural están muy de moda, una tendencia que no pasa porque nos aportan muchos beneficios a nuestros ambientes. Especialmente con la llegada del buen tiempo nos apetece más aún este tipo de texturas, incluso para pisar descalzos y sentir esa sensación de rugosidad artesanal en nuestros pies.
Al principio las alfombras de tejidos naturales comenzaron a utilizarse en exteriores o zonas de entrada y salida de la vivienda, y poco a poco han entrado en casa para quedarse en interiores para siempre.
Su resistencia y durabilidad les hacían idóneas para zonas fuera de casa, sin embargo, hoy encontramos las alfombras más lisas de trenzados sencillos o, por el contrario, alfombras que combinan diferentes tejidos como algodón, lana, lino, cuerda, telas… y dibujos o colores distintos.
Un caso similar son las cestas que también comenzaron a entrar en nuestros hogares poco a poco en lugares puntuales como maceteros de exteriores o como cestos de ropa sucia, para guardar leña, como revisteros o como ‘guarda-juguetes’, y hoy han colonizado todas las habitaciones de nuestro hogar.
La cestería en sus mil modalidades, colores y texturas han invadido desde dormitorios infantiles con altas dosis de fantasía, a cuarto de juegos, de estudio, despachos, entradas y distribuidores, pasillos y zonas de paso, exteriores, sótanos, salones y comedores, baños y aseos… Nos encantan las cestas, cajas con tapa, bandejas en tejidos naturales como rafia, esparto, yute, mimbre, bambú…
¿Qué aportan a nuestra decoración las fibras naturales?
Tranquilidad, calidez, armonía, calma, relax o sencillez entre otras muchas sensaciones irremplazables por otros materiales sin lugar a dudas. Un hogar acogedor, sosegado, pacífico y tranquilo con tonalidades muy neutras y que nos conectan directamente con la naturaleza.
No es fácil darte cuenta hasta que logras descubrir que una casa es la suma de sus colores, sus espacios, sus materiales y que todos ellos juntos y dispuestos de una u otra manera logran decirte muchas cosas.
¿Qué te dice a ti tu casa? Prueba a introducir materiales naturales a ver si notas diferencias… Si quieres que los interioristas de Grupo Index te ayuden, ponte en contacto con nosotros.
