Ahora que tan de moda está el ayuno intermitente como dieta para ponernos a punto para el verano, los nutricionistas nos recuerdan que algunos alimentos poseen sustancias que nos aportan directamente felicidad. Alimentos con altas concentraciones de serotonina que transmite a nuestro cerebro directamente la sensación de placer.
Es el sueño de muchos, ser felices comiendo. Eso sí, hablamos de alimentos saludables, porque no todo lo que engorda está rico, hay mucho más. En opinión de los expertos, siempre es recomendable comer de todo y enriquecer nuestra dieta con esos alimentos que no tomamos habitualmente. Vamos a repasar cuáles nos ayudan además a subir el estado de ánimo y la vitalidad.
Satisfacción y bienestar, es el mensaje que la serotonina, un neurotransmisor natural, le manda a nuestro sistema central y nuestro cerebro siente simplemente felicidad. Esta hormona regula por ejemplo nuestro apetito, la líbido sexual, nuestro estado de ánimo, incluso la paciencia y la sociabilidad. Por lo que ingerir alimentos con alto contenido en serotonina no es baladí.
Al contrario, se han encontrado bajos niveles de esta sustancia en personas con sobrepeso, que sufren migrañas, enfermedades autoinmunes, hiperactividad, intestino irritable, entre otras dolencias incluso crónicas. Se ha demostrado que si a nuestro organismo le falta esta sustancia, se desencadenan síntomas como la ansiedad, angustia, agresividad, miedos o trastornos alimenticios.
También el equilibrio del sueño reside en la ingesta de alimentos ricos en la conocida como ‘hormona de la felicidad’. El ciclo sueño-vigilia se regula gracias a neurotransmisores como la serotonina y la mejor forma de tomarla es de forma habitual y constante en una dieta equilibrada y saludable como la dieta mediterránea de platos sanos y tradicionales.
Al contrario de la felicidad, una ausencia de serotonina en nuestro organismo provoca mal humor, pensamientos negativos y pesimistas, ansiedad e irritabilidad, depresiones, nervios e impulsos incontrolados como pánico, dependencias o insomnio, entre otros.
La glucosa y el triptófano que contienen los alimentos de forma natural, ayudan a sintetizar la serotonina, la hormona de la felicidad responsable de nuestra tristeza o alegría, de la sensación de satisfacción y de nuestro bienestar general anímico. Y de ahí la importancia de una buena alimentación, variada y saludable en la que no falte de nada con moderación.
¿Dónde encontramos la serotonina de forma natural? En nuestra alimentación no pueden faltar, es más, debemos buscar premeditadamente vitaminas B y C, magnesio y triptófano a través de:
- Frutos secos.
- Pescados, carnes y huevos.
- Aguacate, plátano y piña.
- Naranja, limón, tomate y kiwi.
- Chocolate y cacao.
La mejor recomendación es desayunar variado con base en todos estos alimentos pero en cantidades moderadas para evitar desequilibrios de otras sustancias como la glucosa. No se trata de comer mucho ni más, si no de comer algunos alimentos que las dietas hipocalóricas han demonizado durante años.