De toda Europa, Madrid quiere convertirse en una de las ciudades con una de las mayores áreas de bajas emisiones contaminantes. Es el ambicioso reto que se ha anunciado en la sexta edición del SUMMIT 2002, el encuentro ‘Impulsando la Movilidad Sostenible desde las Empresas’.
En este foro sobre la movilidad sostenible, la representante del consistorio madrileño, Lola Ortiz, ha querido avanzar una zona de bajas emisiones que creará ejemplo en el resto de Europa. La directora general de Planificación e Infraestructuras de Movilidad del Ayuntamiento de Madrid, ha destacado todas las diversas normativas que ha desarrollado el consistorio de la capital española, y el tremendo trabajo que se está desarrollando para ampliar la extensión de la zona de aparcamiento regulado con criterios sostenibles.
Una Ordenanza de Movilidad Sostenible aprobada en septiembre de 2021 que logrará que Madrid sea en 2025 una de las grandes ciudades europeas con una zona de bajas emisiones más amplia. Ya que “todo el término municipal va a ser una zona de bajas emisiones, hemos empezado de forma progresiva”.
Desde este enero 2022 los coches con motores más contaminantes, es decir, sin etiqueta ambiental, no pueden acceder en la ciudad de Madrid. Y, según ha anunciado Ortiz, “el año que viene, desde el 1 de enero de 2023, no podrán entrar ni en la M30 ni en el interior de la M30, en 2024 no podrán entrar en todo el término municipal de Madrid y en 2025 esta medida también se aplicará a los residentes, ya ni los residentes ni los que visitan la ciudad podrán acceder a Madrid con vehículos sin etiqueta medioambiental. Por eso hemos lanzado esta línea de ayudas tan importante para facilitar a los ciudadanos este cambio a vehículos más sostenibles”.
