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¿Llegamos tarde en España a la electrificación del transporte?

¿Logrará España una electrificación del transporte a tiempo?

En 2035 nuestro transporte sufrirá un cambio de ciclo, una trasformación del modelo actual para luchar contra el cambio climático. Una lucha mucho más contundente, desde un sector que hasta ahora es de los más contaminantes de todo el tejido industrial.
La revolución de los coches y de la forma de movernos, especialmente en los núcleos urbanos y grandes ciudades, irremediablemente tiene que cambiar. Antes o después el modelo actual caducará y el cambio puede ser más cómodo para todas las partes si es gradual.
Hoy comprar un coche nuevo empieza a parecerse a la decisión de comprar una vivienda nueva, es decir, el montante de un vehículo eléctrico hoy es tan elevado que hace que la toma de esta decisión se retrase en el tiempo y se realice en menos ocasiones que hace unos años. Los precios de los coches diésel y gasolina eran para una familia un importe asumible con mayor facilidad. Sin embargo, hoy el precio de los utilitarios con motores híbridos o eléctricos es mucho más elevado.
Este problema para algunas familias se traduce en una clara contención en el número de matriculaciones de nuevos coches eléctricos. Más allá de los turismos particulares, las medidas transversales y sobre todo, desde el ámbito público, tiene que ser más contundentes y visibles. El cambio debe producirse y la sensibilidad hacia ese cambio que se note y sea vea en el ejemplo de ayuntamientos, ministerios, consejerías, diputaciones, comunidades…

Un claro ejemplo son los puntos de recarga rápida y súper rápida de los automóviles eléctricos. Hoy tenemos un punto público de recarga por cada diez vehículos eléctricos. Un desequilibrio evidente que debe poner la cara colorada a las instituciones públicas. Desde la patronal de fabricantes de coche, ANFAC, en 2030 España tendría que tener disponibles más de 340.000 puntos de recarga públicos. Un aumento que supone multiplicar por 30 los actuales, y que se adquiriera un ritmo que garantice alcanzar los hitos que marca Europa.

punto de recarga de coche eléctrico

El Observatorio de la Movilidad Sostenible junto a algunas marcas fabricantes de coches, abordan colaboraciones para mejorar la competitividad en esta revolución del modelo de transportes. “Exponer y debatir los retos y las oportunidades que supone la electrificación del transporte en España, ante el horizonte temporal propuesto por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para que los países desarrollados dejen de producir vehículos de combustión en 2035, horizonte similar al reflejado en la Ley de Cambio Climático que prohibirá matriculaciones de vehículos de combustión en 2040 en España.”
Todas las instituciones y organizaciones internacionales se vuelcan en hojas de ruta para poner ‘negro sobre la blanco’ los siguientes pasos como muestra del firme compromiso. Lo cierto es que la incredulidad internacional es uno de los grandes hándicap. No es la primera vez que esos compromisos se plasman en documentos firmados y avalados por estas entidades, marcas y gobiernos, sin embargo, los avances reales y tangibles son menos ambiciosos.

Algunos puntos comunes básicos para la electrificación del transporte:
  • Infraestructuras públicas de recarga
  • Transporte público eléctrico
  • Restricciones a vehículos especialmente contaminantes
  • Protección de zonas de bajas emisiones
  • Incentivos fiscales al vehículo eléctrico particular
  • Nuevos combustibles y ecocombustibles