Es la imagen de la esperanza: ver las manos de una persona con una tetraplejia que logran recuperar movimientos. Un ensayo clínico con estimulación eléctrica ha conseguido que pacientes tetrapléjicos usen sus manos.
Las funciones de manos y brazos vuelven a tener capacidad gracias a un sistema denominado ARCEX que ha sido exitoso en más del 70% de las personas pacientes, según afirma el artículo de Nature que recoge el tremendo avance tecnológico que supone para la ciencia.
Las lesiones medulares si son cervicales, suelen causar alteraciones permanentes en la movilidad y funcionalidad de brazos y manos, lo que coarta en mayor o menor medida la calidad de vida y autonomía de los pacientes que las sufren. Hasta ahora uno de los grandes hándicaps, y por lo tanto objetivos de la investigación, era lograr recuperar esa movilidad y esas funciones gestionadas por el sistema nervioso central, sin embargo, hasta la fecha no se habían logrado terapias muy efectivas y/o esperanzadoras, según el director del Instituto de Bioingeniería de la Universidad Miguel Hernández de Elche (Alicante) y responsable del grupo de Neuroingeniería Biomédica del CIBER-BBN, Eduardo Fernández.
Incluso la mayoría de los pacientes notaron una mayor sensibilidad, además percibieron varias mejoras en sus síntomas o molestias previas a la terapia:
- Reducción de los espasmos musculares
- Mejora de la calidad del sueño
- Disminución del dolor y su intensidad
Unos electrodos transmiten descargas de unos 30 hercios de potencia con una frecuencia de 10 kilohercios en 10 pulsos de 100 microsegundos, y con esta estimulación eléctrica externa, se abre una nueva vía de estudio y una herramienta terapéutica no invasiva capaz de regenerar y restaurar esas funciones que se perdieron con la lesión medular.
Es lógica la alegría y esperanza que se ha despertado con este estudio y sus resultados, pese a lo cual, sus responsables continúan afirmando que son precisos más estudios y testar mucho más esta terapia.