Miles de campañas de concienciación y educación sexual, alertan en todo el mundo de la terrible influencia del porno y el cine de adultos en la formación de la conciencia sexual de los más jóvenes. Sin embargo, mientras esta industria sigue aumentando sus cifras de negocio año a año, nada o muy poco se invierte en materiales audiovisuales adaptados a jóvenes y adolescentes en este terreno tan importante de sus vidas.
La sexualidad es una parte fundamental de la vida de un adolescente, y su exploración, sus tabúes, sus estereotipos, sus leyendas, … Sin embargo, la inversión pública ni privada en este sentido es mínima por no decir nula.
‘Sex Symbols’ es una serie de dibujos animados lanzada desde el canal autonómico valenciano para paliar esta carencia formativa e ilustrativa a nuestros jóvenes. Desde un prisma cómico, divertido e informal tratan temas afectivos y sexuales básicos.
Esta serie está preparada para ilustrar a niños y niñas desde ocho años en adelante, en temas que son muy importantes y trascendentes para ellos. Que, además, pueden marcar su vida y que antes o después tendrán que descubrir.
Con delicadeza, respeto y grandes dosis de tolerancia, esta serie de dibujos animados intenta sentar las bases en los menores de edad sobre su cuerpo y su disfrute.
La revolucionaria serie ya ha sido comprada por plataformas de otros países como Portugal o Bélgica y ha recibido premios como el ‘World Media Festival de Hamburgo’ como mejor producto audiovisual educativo.
La necesidad de este tipo de relatos audiovisuales, especialmente adaptados a un público en el que la desinformación es muchas veces el único denominador común entre jóvenes de todos los rincones del planeta. Niños y jóvenes que según muchos indicadores internacionales, reciben su primera información sobre temas sexuales consumiendo porno en edades tan tempranas como los 8 y 10 años.
“Los y las adolescentes ven pornografía por primera vez a los 12 años y casi 7 de cada 10 (el 68,2%) la consumen de forma frecuente. Este consumo se produce en la intimidad (93,9%) y en el teléfono móvil y se centra en contenidos gratuitos online (98,5%), basados de manera mayoritaria en la violencia y la desigualdad. Así lo revela el informe '(Des)información sexual: pornografía y adolescencia' que hemos elaborado desde Save the Children para estudiar el consumo de contenidos sexuales entre la población adolescente y el impacto que estos tienen en sus relaciones y su desarrollo. Nuestro estudio, que ha contado con la participación de 1.753 chicos y chicas de entre 13 y 17 años, señala que más de la mitad de los y las adolescentes que ven contenidos pornográficos se inspiran en ellos para sus propias experiencias y que para el 30% estos vídeos son su única fuente de información sobre sexualidad.”
Educar, sensibilizar, formar y descubrir con respeto y seguridad es fundamental para atajar grandes problemas y lacras sociales como la violencia de género, los delitos de odio o las vejaciones entre el ámbito escolar.
La sinopsis básica de esta nueva serie de dibujos animados educativa en temas de sexo, se basa en varios protagonistas para identificar a distintas personalidades, “Carla, Mia, Max y Hugo están entrando en la pre-adolescencia cuando empiezan a surgir sus primeras dudas sobre sus cambios físicos y su sexualidad. Sus propios órganos serán los encargados de aclararlas. Junto a ellos, los más jóvenes aprenderán sobre educación sexual y afectiva a través de la animación y el entretenimiento.”
Capítulos cortos de unos siete minutos en los que sus personajes protagonistas, dos niños y dos niñas, hablan de menstruación, erecciones, cambios hormonales y de su cuerpo, métodos anticonceptivos, entre otras cuestiones. Todo desde una fórmula entre cómica y natural para que el lenguaje sea idóneo y respetuoso pero también sencillo y adaptado a estas edades.
