NANICONSEJO
Es la primera pregunta al distribuir tu salón, ¿dónde vamos a poner la tele? Y enfrente el sofá, y en este lado queda hueco para la mesa del salón… Suele ser el punto de inflexión de donde surge la distribución del salón. Antaño, en opinión de Nani Palomo, nuestra interiorista, el mueble principal, casi siempre desde el suelo al techo y cubriendo una pared entera, dejaba un espacio para integrar la televisión. Sin embargo, hoy esos muebles de tele se han aliviado muchísimo y, o bien son un mueble debajo del televisor, o son muebles mucho más bajos y pequeños. Ya no cubrimos una pared entera con un mueble enorme.
Es importante medirlo todo, es decir, en un salón rectangular quizá una televisión de demasiadas pulgadas de tamaño puede resultar desmesurada. El tamaño de la televisión es una cuestión que se ha puesto muy de moda, y con una máxima ‘cuanto más grande mejor’. Sin embargo, desde el punto de vista decorativo no es una opción ni elegante ni equilibrada. Hoy en día también debemos tener en cuenta el espacio donde vamos a colocar otros aparatos y sistemas de altavoces inteligentes o similares que solemos disponer en muchas ocasiones cerca de la televisión.
Pequeños aparadores, módulos, mesas acondicionadas, muebles bajos incluso muchos con ruedas para acercar o alejar nuestro televisor dependiendo de las necesidades, y muchos paneles y soportes para televisores colgados en la pared. Los materiales y las combinaciones son muy funcionales, hay integrar y combinar este mueble con el resto del salón, así que puedes escoger maderas, lacados, cristal, metálicos, contraste de colores brillante con neutros, e incluso contrate de materiales. Estos muebles tienen una gran función práctica pero ornamentalmente también cobran una gran importancia por la colocación y el protagonismo de su principal inquilino: el televisor.
Los muebles bajos y los aparadores son la opción más escogida, especialmente en los salones y dormitorios. Es un tipo de muebles muy versátiles, en miles de medidas y estilos y que se adaptan a una estancia cuadrada, rectangular, distribución en dos ambientes, uno. Permiten disponer de puertas abatibles para almacenaje, cajones, estantes para libros y pequeños elementos decorativos. En el caso de los muebles modulares puedes combinar incluso varios módulos para adaptarlos a tus necesidades y gustos.
Colgar la televisión en la pared hasta hace poco tiempo no era una opción muy escogida, sin embargo esa tendencia se está invirtiendo. Los paneles en maderas como roble natural, lavado o patinado, por ejemplo es una moderna solución de espacio y de estilo. Cuando nos falta espacio o fondo, por ejemplo en un salón rectangular, es una buena alternativa. Los paneles de televisión siempre van acompañados de un mueble debajo, no es necesario, es simple combinación decorativa.
Hoy, gracias a miles de soluciones domóticas, podemos jugar con los espacios y que la televisión no ocupe un lugar privilegiado todos los días del año, si solo la vamos a usar en contadas ocasiones. En este caso podemos integrarla, o mejor dicho ocultarla en el techo y hacerla bajar cuando nos haga falta. Hay que pensar que tenemos varios televisores en diferentes habitaciones de la vivienda, y precisamente la del salón no es la más utilizada. El hándicap de esta solución es el precio de estos sistemas de integración que suele ser bastante elevado.
