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Resiliencia de nuestra economía

Turismo, servicios, vivienda,… Los sectores estratégicos tiran de nuestra economía que se mantiene fuerte. Solidez apuntalada por el FMI; el PIB de España crecerá en 2024 un 2,5%, el mayor crecimiento de los países avanzados por delante de EEUU.

El Fondo Monetario Internacional augura para España el mayor crecimiento de las economías avanzadas para España. En 2024 creceremos un 2,5%, en lugar del 1,5% que nos proyectaron en su última estimación de abril.

Así, el FMI nos sitúa en tasa de crecimiento incluso por delante de los Estados Unidos que avanzarán un 1,8%, que es el país que más se acercaría a nuestro dato. Hace tres meses conocimos la última estimación y ahora se eleva hasta un 1% más para nuestro país, precisamente inmersos en el verano por los buenos datos de sectores clave como el turismo y los servicios que están tirando de nuestra economía con gran vigor, incluso por encima de lo que esperábamos.

Turismo y servicios soportan el peso de nuestra economía y tiran de un carro que sigue muy estable y fuerte. Situación similar ocurre en Italia, donde la economía se ve muy reforzada, especialmente en verano, gracias al turismo, aunque no en la medida que lo hace en nuestro país. Sin embargo, otras economías europeas como Alemania, no auguran crecimiento, al contrario.

La situación internacional también mejora sus expectativas según el FMI, aunque los datos son menos halagüeños que en nuestro país, por lo que no sólo somos líderes en Europa del crecimiento, sino también entre las economías avanzadas de todo el planeta.

Las subidas de tipos de interés preocupan a los analistas internacionales, aunque parece que esta medida podría echar el freno por el momento. Al igual que la inflación, que ha comenzado a moderarse en muchas economías, y parece que lleva tendencia a contenerse en lugar de seguir en su dinámica expansionista.

Mientras las graves tensiones geoeconómicas se mantengan avivadas desde Rusia, EEUU y China, la economía seguirá sufriendo y la incertidumbre continuará siendo protagonista en los mercados internacionales. Sin embargo, todo indica que los datos económicos ganan estabilidad y confianza.

Las autoridades financieras internacionales piden a los bancos de todo el mundo que amplíen sus ‘colchones’ para evitar sobresaltos como ya ha pasado en algunas entidades como la estadounidense Silicon Valley Bank o la suiza Credit Suisse. Reforzarse e inyectar así tranquilidad a los inversores y los mercados para evitar riesgos antes las fluctuaciones que puedan venir en los próximos meses.

Optimismo y garantías es la nota dominante en los datos y expectativas de las entidades regulatorias como el FMI. Sin embargo, la incertidumbre sufrida en los últimos años hace que muchos sigan siendo incrédulos a que en los próximos meses no suframos ‘sobresaltos’ que vuelvan a hacer tambalear los cimientos actuales de nuestras economías y sistemas financieros.

Dos preocupaciones se extienden a todas las economías: lucha contra la inflación con medidas que encarecen la financiación, y la salud de las entidades financieras. Para conseguir mayor confianza y perder ese recelo a los bancos, el tiempo y la estabilidad serán los mejores aliados en los próximos meses.

China se estanca y Latinoamérica crece

Brasil y México crecen más y la estimación económica para América Latina sube un 0.3% sus previsiones de crecimiento, lo que eleva su PIB regional un 1,9%. Datos muy optimistas que auguran una tendencia de crecimiento muy positiva pese a las advertencias de los analistas financieros que ponen el foco en los elevados intereses de los bancos centrales ante la ola inflacionista latinoamericana.

Sólo México crecerá un 2,6% gracias su sector servicios que parece levantar el vuelo a cifra precovid, mientras que Brasil crecerá un 2,1% gracias a su potente agricultura. Dos economías que lideran y tiran de la recuperación en América Latina.

Al otro lado del mundo, el sector inmobiliario chino ha mostrado síntomas de debilidad y su PIB sólo ha crecido un 0,8% en el segundo trimestre de 2023, mientras que nos tenía acostumbrados a sumar dos tercios del crecimiento en todo el mundo. Cifras que dan vértigo y que a muchos les lleva a pensar que nos contagiará de su estancamiento al resto de mercados antes o después.