El futuro del planeta es una gran preocupación para todos, sin embargo, hace falta mucha más concienciación para que todos, empresas, administraciones, ciudadanos... hagamos mucho más. Todos tenemos en nuestras manos acciones para evitar la emisión de miles de toneladas de gases contaminantes cada día. Dar visibilidad a este problema es también tarea de todos, porque las medidas son imprescindibles, pero también darles difusión.
Hay campañas de marketing que se valen de la sostenibilidad para tener un mayor impacto, porque lo verde está de moda y lo verde vende. Más allá del conocido 'postureo verde' o 'greenwashing', miles de agencias de publicidad, y miles de compañías, han visto tirón en soluciones ecológicas. Otras han visto cómo los valores de sus productos se alineaban con la mayoría de la sociedad, preocupada por el medio ambiente y por el cambio climático.
Es el caso de una empresa de regalos originales cuyo producto estrella es el abanico. Esa sencilla herramienta pero efectiva y saludable. Precisamente un método para aliviar las altas temperaturas veraniegas sin necesidad de aire acondicionado, y por lo tanto, sin sus emisiones de efecto invernadero a nuestra atmósfera. Para sacarle partido a sus abanicos, no sólo han hecho modelos con mensajes llamativos y sorprendentes:
- 'I'm hot'
- 'Yo no sudo, brillo'
- 'Putos sofocos'
- 'Mum, i ok'
La creatividad de 'fisura', que así se llama la empresa de regalos originales, les ha llevado a lanzar una canción pegadiza y alegre para concienciar y para intentar, de paso, convertirla en un verdadero hit viral este verano y dar a conocer sus productos. Es un círculo beneficioso lo mires por donde lo mires.
- sostenibilidad
- economía
- medio ambiente
- tendencia de verano
"Más abanico, más abanico" es tan sencillo que se recuerda fácil y su mensaje igual: para evitar el cambio climático hay que tomar medidas, pon en tu mano un abanico y no enciendas el aire acondicionado. No es la primera vez que una idea a priori poco elaborada, es tan contundente que efectivamente se hace viral y llega a todos precisamente por su sencillez. Algo tan tradicional, barato, accesible para todos, puede ayudar y hacernos triunfar... Ojalá más iniciativas así, como medida para luchar contra el cambio climático, y como campaña divertida y efectiva para sus responsables.